Aranjuez luce espectacular durante todo el año, pero posiblemente es en el otoño cuando se pone sus mejores galas...
Aprovechando estos días en los que aún no hace demasiado frío y la lluvia todavía respeta, el viernes después de dejar a las niñas en el colegio salí a caminar con Laura y Lola -Mónica se nos echó atrás a última hora, pero así se dará cuenta de lo que se perdió ;)- y decidimos dar un paseo por la zona de los sotos, así que cogimos camino hacia las Doce Calles para cruzar la antigua nacional IV y tomar camino hacia Legamarejo.
Paseo ameno al lado de Laura que nos iba ilustrando a Lola y a mí con su conocimiento de la zona, del río Tajo, de las construcciones de la zona... Cerca del Rancho Grande, en la zona ocupada, nos salieron unos perrillos ladrando y haciendo mucho ruido. Aunque se ha denunciado hace tiempo, aunque ha salido en los medios de comunicación, parece que de momento ni desde Ayuntamiento ni desde Comunidad Autónoma se ha solucionado el problema (ni demasiadas ganas me parece a mí que hay), y lo cierto es que pasear con niños o ir en bicicleta por la zona se convierte en un "pequeño problema".
Después llegamos a la calle Lemus y allí nos encontramos con otra sorpresa, esta en forma de animal de bellota y vista baja :)
No es algo habitual, aunque parece que últimamente no es extraño encontrarse con alguno de estos especímenes por la zona. El cerdo atravesó el camino y se fue directo a la zona vallada donde unas yeguas estaban con sus potrillos. Como las intenciones no parecían demasiado amigables las yeguas se defendieron del intruso a fuerza de coces.
¡Hay que ver lo que puede dar de sí una mañana de paseo por la zona!
Esta mañana, y aprovechando que la lluvia aún no había hecho acto de presencia, nuevo paseo por la zona, con la compañía de Gema Paula, disfrutando de los espectaculares paisajes ribereños.
¿Se le ocurre a alguien un lugar mejor para hacer marcha nórdica? ;)
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